Días como estos, en los que la sociedad se moviliza por apoyar un movimiento que muchos no creen que tenga una buena causa como lo es el Teletón, me doy cuenta que cada quien en esta vida tan terrenal vive para ver la vida de una forma sin sentido, otros con el propósito de hacer algo para pitar a quienes lo necesitan y otros tantos que se mantienen indiferentes ante estas situaciones.
En mi caso podría decir, que año con año veo cómo evolucionan algunos casos, lo que se puede llegar a lograr si se tocan los acordes correctos para llegar algo corazón de miles de personas y aportar un granito de arena, es maravilloso y conmovedor, porque desde que tengo memoria mis padres me han inculcado ayudar a quien se pueda, de ahí nació mi deseo de llegar a hacer algo gratificante por mi, estudiar psicología para poder especializarme en la educación especial, y gracias a la vida tuve la fortuna de poder llegar a ser maestra de niños con discapacidades, y más que ser su maestra fui su alumna, ellos me enseñaron que no hay discapacidad alguna qu este impida lograr tus sueños, porque si se quiere se puede, tantos sueños y proyectos por realizar y lo único que se necesita es una receta tan sencilla, llena de entusiasmo, ganas de salir adelante, un montón de amor por lo qué haces, y siempre luchar por lo que quieres y te apasiona, "rendirse" es una palabra que jamás estuvo en mi vocabulario, ni en la educación que me dieron mis padres, y en estas fechas es cuando se agradece el camino recorrido, los logros y las enseñanzas aprendidas en los pequeños pero significativos fracasos que lo que hacen es sacarme adelante, y aún así siempre busco la manera de crear nuevas cosas, ayudar en lo que puedo, y vivir la vida de la manera más fascinante a través de mi carrera, mi familia, mis amigos y mi novio, todo ello es un conjunto ¡INCREÍBLE!
En mi caso podría decir, que año con año veo cómo evolucionan algunos casos, lo que se puede llegar a lograr si se tocan los acordes correctos para llegar algo corazón de miles de personas y aportar un granito de arena, es maravilloso y conmovedor, porque desde que tengo memoria mis padres me han inculcado ayudar a quien se pueda, de ahí nació mi deseo de llegar a hacer algo gratificante por mi, estudiar psicología para poder especializarme en la educación especial, y gracias a la vida tuve la fortuna de poder llegar a ser maestra de niños con discapacidades, y más que ser su maestra fui su alumna, ellos me enseñaron que no hay discapacidad alguna qu este impida lograr tus sueños, porque si se quiere se puede, tantos sueños y proyectos por realizar y lo único que se necesita es una receta tan sencilla, llena de entusiasmo, ganas de salir adelante, un montón de amor por lo qué haces, y siempre luchar por lo que quieres y te apasiona, "rendirse" es una palabra que jamás estuvo en mi vocabulario, ni en la educación que me dieron mis padres, y en estas fechas es cuando se agradece el camino recorrido, los logros y las enseñanzas aprendidas en los pequeños pero significativos fracasos que lo que hacen es sacarme adelante, y aún así siempre busco la manera de crear nuevas cosas, ayudar en lo que puedo, y vivir la vida de la manera más fascinante a través de mi carrera, mi familia, mis amigos y mi novio, todo ello es un conjunto ¡INCREÍBLE!
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